"Lo que están haciendo en los hoteles alojamientos me parece una aberración. Ahí no se puede controlar". Las palabras del gobernador, José Alperovich, embistieron contra el modo de fiscalizar que adoptó el director de Rentas, Pablo Clavarino.
El mandatario manifestó ayer su disconformismo sobre el accionar de los inspectores del organismo en las habituales charlas matinales con la prensa, luego de supervisar obras. Entre el viernes y el sábado, 52 inspectores de Rentas se apostaron en las inmediaciones de algunos hoteles alojamiento con el fin de controlar si esos negocios entregaban facturas por los servicios prestados a sus clientes. Además, fiscalizaban el pago de las boletas vencidas este año del impuesto Inmobiliario.
"No estoy de acuerdo para nada con lo que hacen. Allí no se puede controlar", puntualizó el gobernador.
Clavarino, en tanto, no atendió las llamadas que le hizo LA GACETA. Su entorno se mantuvo en silencio. Antes de hablar con la prensa, Alperovich le reprochó al director de Rentas los alcances del operativo. Lo hizo por teléfono, ya que el funcionario se encontraba en Buenos Aires.
Se prevé que hoy se concrete una reunión de trabajo entre el gobernador, el director de Rentas y el ministro de Economía, Jorge Jiménez.